Tomada de “Iguala la Trigarante” de la Profesora Catalina Pastrana.
Doña Lola en los momentos de morir sintió angustia porque su hija comenzó a sentir los dolores de parto y el esposo trabajaba en Cuernavaca.
Esa misma tarde el esposo llegó directamente al ISSSTE muy a tiempo para atender a su mujer y a su hijo.
Cuando todo pasó y el pequeñito dormía en el cunero, ella le pregunto a su esposo:
-¿Quién te avisó que llegaste tan pronto?
-Tu mamá. Por cierto que la vi delgada y pálida
-¿Mi mamá?
-¡Si!
-¡No puede ser!
-Sí pues, ella fue y me dijo que me viniera rápido, que te habían traído al ISSSTE porque ya iba a nacer el niño,. Insistió que me viniera presto.
-¡Oh Dios! ¿cómo fue?
-¿Por qué?
-Mi mama está tendida, murió esta mañana.
-¿Pero entonces? Yo hable con ella, hablamos.
-¡Cálmate, cuando se pueda hablaremos con un padre. ¿Te parece? siéntate, el padrecito nos explicará.